La verdad es que había
escuchado mucho acerca de metodologías
educativas novedosas en Cataluña, pero no tanto donde yo vivo, en Galicia.
Sin embargo, parece que la revolución metodológica está llegando para quedarse,
sin vuelta atrás, asomándose tímidamente, a todas las comunidades.
La mayoría de las propuestas no
esconden la influencia del sistema
finlandés, experimentando con un colegio sin exámenes, sin asignaturas, con
aulas abiertas e, incluso, sin división por edades, y parece que los resultados
están siendo muy positivos.
En estas nuevas metodologías, las nuevas
tecnologías están muy presentes, al igual que el trabajo por proyectos y la
relación con el entorno. En algunos centros, se apuesta por una metodología muy
de moda, la gamificación,
que está adquiriendo gran protagonismo en la actualidad. Igualmente, se deben
destacar interesantes iniciativas
para promover la inclusión de un modo activo.
A pesar del presente momento de incertidumbre
que se está viviendo, muchos centros están tomando la iniciativa, gracias a
ellos, a su profesorado, a su alumnado y unos padres abiertos al futuro, los
estudiantes están disfrutando de un modo de aprender diferente, donde cada vez
son más protagonistas. Y no hace falta irse a Finlandia.